Patrón de los pobres, llamo a tu
espíritu para pedir de ti un favor.
Tengo en mis manos una muleta y una
medalla que lleva tu nombre. Y te
ruego siempre hagas justicia por mí.
Creo en ti, San Lázaro, en el nombre
del Padre, del Hijo y del Espíritu
Santo, y que me juzgues en necesidad
de mi petición.. Confiando en tu
bondad infinita a través de tu
intercesión a Jesucristo.
Amén